
A la noche estrellada....
Ante el mar y su corte....
He colgado un par de alas al pensamiento....
Que desde las alturas pierdo el vértigo por vivir...
He prestado mi despertar al sueño que se esconde en mis noches...
Que al andar, despejo el subconsciente y los claros me acercan pedacitos de ilusiones.
A la estrella de siempre....
A los vientos que sacian mi sed....
Ante el cielo y sus llaves....
Cuando escucho el silencio y empiezo a ordenar....
Un latido, un recuerdo, un amor y se enciende la emoción...
Cuando cierro los ojos y a ciegas veo lo que antes no vi.
Y es que, un, dos, tres....respiro y las puertas se van abriendo.
A la mañana soleada...
A la primavera coloreada....
Ante la tierra y su alma....
Escribo en el aire lo que mi boca dice sin voz...
Que la soledad es sorda pero sabe leer los labios....
Hipoteco mi corazón con mi otro corazón....
Por siempre, sin contrato, eternamente, sin cláusulas...
Al presente más latente...
Ante mi y ante ti....
Que con esas ropas que bien me veo en el espejo....
He untado a los días el ungüento de la esperanza...
Que tengo pomada sin fecha de caducidad....
A la estrella de siempre....
A la mañana soleada....
A la vida y al destino....