Cuando la ilusión llena tus vacíos y crecen mariposas que
traspasan hasta el cielo.
Cuando llega hasta tu alma con mil de sueños y un redoble de
tambores se oye en el umbral de tu corazón.
Cuando asoma en tu
mirada y despeja oscuridades, pinta el negro en verde y lo que antes era un
charco, ahora es el mar de tu dulce esperanza.
Cuando sabes que sonríes porque ella en tus adentros siembra
alegría a la vera de tu esfuerzo. Cuando despiertas y comprendes, que la
vida es de color porque el lienzo y el pincel, es ella... tu amada
ilusión...
Con ella; un sol de veinticuatro horas...
Una luna de deseos...
Un tendedero de luceros...
Un traje de héroe con los poderes del querer y del poder...
Una fuente diaria y tus bolsillos a reventar de monedas...
Una estrella fugaz a ralentí...
Ay, ilusión, qué tienes que contigo vuelo, gano, lloro de belleza y ahuyento la tristeza.
Que contigo, puedo, quiero, lucho y comprendo, que el camino está en mis pasos y las semillas en mis huellas.
Que contigo aquí estoy, escribiendo sin pensar, porque solo hay que sentir y dejarse llevar desde adentro hacia afuera.
Ay, ilusión...
La ilusión es como la esperanza, mientras exista estaremos salvados.
ResponderEliminarMe encantó tu texto.
Saludos.
La ilusión debe estar siempre acompañándonos.
ResponderEliminarUn beso.
Incansable, constante, indestructible...
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